Bufete Rodríguez-Cano es un despacho independiente y multidisciplinar, con una satisfactoria trayectoria profesional en Granada y otras provincias desde 2003, que aúna, junto a una visión clásica del Derecho, una constante atención a las nuevas tendencias de desarrollo jurídico. Nuestra firma se caracteriza por la prestación de un servicio honesto y eficaz, adaptado a las necesidades de cada cliente, siendo los principios rectores de su actuación:

• Información y trasparencia: Gracias a un amplio conocimiento de las distintas áreas del Derecho, ofrecemos a nuestros clientes un asesoramiento jurídico de calidad, tratando de darles siempre la mayor información posible, con una descripción detallada de todas las actuaciones. Es importante resaltar que no tramitamos expedientes que no tengan posibilidades de éxito, y ello en interés del cliente, que no debe soportar gastos innecesarios.
• Vinculación y confianza: Nuestros esfuerzos van dirigidos a crear un vínculo especial con cada cliente y sus problemas, de manera que tenga la seguridad, tranquilidad y confianza que necesita durante la tramitación de su asunto.
• Disponibilidad y dedicación: Estamos siempre a la total disposición de nuestros clientes durante la operación que nos encomienden, con un trato cercano y una dedicación constante a su caso.
• Comprensión y flexibilidad: En nuestro despacho, ante todo, son prioritarias las necesidades de nuestros clientes, de ahí que busquemos ofrecerles las soluciones más viables, concretas y rentables. Además, somos flexibles en el precio y en la forma de pago, dando a conocer por adelantado y con absoluta trasparencia nuestros honorarios. Para ello, suscribiremos con nuestros clientes una hoja de encargo, con el fin de determinar el alcance del servicio contratado, la forma y el importe de la retribución.
• Trabajo y excelencia: Realizamos un trabajo diligente, serio y riguroso, para conseguir el más alto nivel de excelencia.
• Ética profesional: Nuestra actividad profesional está regulada por las normas deontológicas del Ilustre Colegio de Abogados de Granada y por el Estatuto General de la Abogacía Española.

Varias generaciones de abogados y juristas avalan la tradición del Bufete Rodríguez-Cano y su hereditaria vocación de casi dos siglos de derecho. El primer jurista, dentro de la familia, de quien la historia nos da noticia, es Alfonso Manuel Cano Viudez, que comenzó a ejercer la abogacía en 1844. Jurisconsulto de gran reputación en su época -redactó en 1860 las Ordenanzas Municipales de Almería y realizó, en abril de ese mismo año, la primera rotulación de sus calles-, destacó, además, como político, escritor y poeta. Fue diputado por Huércal-Overa en 1864, en 1865 por Vera y en 1875 por Almería. Famoso es el discurso que pronunció en 1873 al instituirse los juicios por jurados, siendo el primer abogado defensor que actuó en ellos. El siguiente eslabón está constituido por un hijo del anterior llamado Pedro Cano Benítez, natural de Huércal-Overa, quien, siguiendo los pasos de su padre, continuó con el ejercicio de la abogacía, siendo también abogado el hijo de éste Alfonso Manuel Cano García-Varona (1879-1956).

Su nieto, Eduardo Rodríguez Cano (padre del fundador y titular de este bufete), conocido por su vocación humanista en la aplicación del derecho penal, obtuvo en 1967 la plaza de juez con tan sólo 25 años, muy por debajo de la media de edad con la que se iniciaban los jueces, convirtiéndose así en el magistrado más joven de España y, por tanto, en el que más tiempo ha ejercido hasta su jubilación en 2012. Ha ocupado el cargo de Presidente de la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia Provincial de Granada (1997-2012), siendo condecorado en dos ocasiones con la Gran Cruz Distinguida al Mérito de San Raimundo de Peñafort (en 1979 y en 2011). Ha compaginado, además, su trabajo con la docencia, impartiendo clases de Derecho penal en la Universidad de Granada, calzando también sus puntos de escritor y poeta. Es nieto, por línea paterna, de otro brillante abogado, político y erudito, Eduardo Rodríguez Sánchez (1881-1941), que, tras terminar sus estudios de Derecho en Granada, ingresó en el Colegio de Abogados de Almería, donde abrió su despacho profesional.

Otra figura relevante, digna de mención por ser uno de los más célebres abogados y notables juristas decimonónicos, trastatarabuelo por línea materna del titular del Bufete Rodríguez-Cano, fue Pedro Nolasco Mirasol de la Cámara (1837-1904). Nacido en Granada, fue Catedrático en Procedimientos Judiciales y Práctica Forense en la Universidad de Salamanca, donde conoció al escritor y filósofo Don Miguel de Unamuno. Desempeñó el cargo de Senador del reino, por la provincia de Almería en la legislatura 1893-1894 y por la provincia de Granada en las legislaturas 1898-1899 y 1901-1902, ocupando en varias ocasiones el de Decano del Colegio de Abogados de Granada.

A todos ellos, nuestro reconocimiento y respeto.